
La comunicación interna sirve como columna vertebral de cualquier organización, facilitando el flujo de información, ideas y retroalimentación entre los empleados en todos los niveles.
A su vez, asegura que todos dentro de la organización estén alineados con su misión, visión y valores.
Al mantener a los empleados informados y comprometidos, la comunicación interna ayuda a construir un sentido de pertenencia y propósito compartido.
También promueve la colaboración, fomenta la innovación y mejora la productividad. Además, una comunicación interna efectiva contribuye a la satisfacción de los empleados, reduce las tasas de rotación y fortalece la relación empleador-empleado.